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jueves, 28 de junio de 2012

No hay Cuba sin virtud


Los corruptos, son peores todavía, pertenecen a esa especie indefinible y abundante de hombres que, a diferencia de nuestros padres fundadores que les dieron candela a sus riquezas para fomentar la patria, estarían dispuestos a darle candela a la patria para fomentar sus riquezas.
Por  Carlos Rodríguez Almaguer

Arnoldo: Muy bueno tu texto sobre la mala calidad del servicio en ese restaurante de Contramaestre. En eso de que a la Revolución joven se le pueden perdonar errores que no deben dejarse pasar luego de medio siglo, me llevas a preguntarnos varias cosas: ¿Qué es la Revolución? ¿Es un ente abstracto?¿Quiénes le dan cuerpo material a la Revolución? ¿No somos nosotros mismos? ¿Hay alguna ley revolucionaria que establezca como principio político o social el maltrato entre las diversas profesiones? ¿No era esa la reflexión del Che cuando en cierta merienda de su Consejo de Dirección les sugería beber a determinados directores de su Ministerio el refresco agrio y terrible que producían sus propias fábricas? ¿No fue él mismo quien estableció el principio, desgraciadamente devenido en slogan, de que la calidad es el respeto al pueblo?

Esa es la pelea, pienso yo, de nuestra generación. La Revolución, para mí, es un sistema de ideas muy nobles y elevadas, que comenzaron a madurar hace dos siglos y que en el último medio siglo han encontrado su expresión material en la construcción de una sociedad que se empeña en ser distinta, mejor, donde el ser humano no sea una cosa más sino "la cosa en sí", parafraseando a Kant. Pero esa sociedad, como cualquier otra, tenemos que hacerla los hombres en el día a día, no solo en los grandes momentos de peligro nacional, aunque ya sabemos por Martí que a los hombres les es más fácil morir con honra que pensar con orden.

Entonces, los errores los cometemos los hombres que, debiendo representar a esas ideas, las negamos o las prostituimos con nuestra ignorancia, y sobre todo con nuestras pequeñeces y miserias. Por eso digo que la Revolución no se defiende sola, tenemos que defenderla todos los días, y en primer lugar de nosotros mismos, de nuestros defectos.

Por eso me alegro mucho cuando sale algo como tu texto, que en nombre de lo que debe ser la Revolución, ataca a aquello que la niega. Esa es para mí la pelea a muerte que tenemos hoy, y que, en lo interno, está fundamentalmente dirigida contra la burocracia y la corrupción, porque a los enemigos les pagan sus amos, sabemos cómo actúan y su propia conducta los desacredita ante un pueblo que sabe discernir, pero a los burócratas los pagamos nosotros y nos hacen más daño porque, siendo muchas veces nuestros representantes, niegan en la práctica lo que está muy bien definido en las ideas.

Los otros, los corruptos, son peores todavía, pertenecen a esa especie indefinible y abundante de hombres que, a diferencia de nuestros padres fundadores que les dieron candela a sus riquezas para fomentar la patria, estarían dispuestos a darle candela a la patria para fomentar sus riquezas. Por eso la bronca contra ellos debe ser a escala social, no solamente un asunto jurídico. "Seamos honrados, cueste lo que cueste: después seremos ricos", como decía Martí.

Para mí la Revolución siempre ha tenido un carácter más ético que ideológico, de eso casi no se ha hablado. Nos hemos basado sobre todo en la parte ideológica de la Revolución, que cualquiera que sean las varias fuentes que la alimentan, todas tienen un basamento ético muy fuerte; y aún más todavía, nos hemos ocupado de su parte política, que es la forma en que se llevan a cabo las ideas, y que debe ajustarse a cada momento histórico, como dice Fidel; pero de alguna manera hemos obviado el hecho cierto de que la principal fortaleza de la Revolución Cubana está en su ética, porque esa, basada en principios universales y con una expresión particularísima, tiene más de dos siglos de cimentación, muchos nombres ilustres e impecables y una memoria larga y prestigiosa. Fíjate si es así, que mirando la realidad cubana de hoy, se reafirma como una gran verdad aquella expresión lapidaria del Santo Cubano, el padre Varela: "No hay Patria sin virtud".

Sé que sabes pensar, y que tienes el valor de decir y de hacer lo que piensas, por eso quería compartir contigo estas ideas, que no son mías, porque ya aprendí hace tiempo que los hombres en las generaciones sucesivas no hacemos más que repetir, en formas y con métodos a veces distintos, las mismas verdades primigenias. Por eso me quedo con aquel verso inolvidable de Neruda en que dice. "Yo solo soy la frente de los que van conmigo."

Un abrazo, hermano.

5 comentarios:

  1. Querido y respetado amigo: de su extensa reflexión, solo me quedo con lo de la " virtud "; pero la virtud sin ética (y en el caso de la sociedad viviente en Cuba ),puede definirla como quiera.

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  2. arnoldo@gritodebaire.icrt.cu29/6/12 5:00 a. m.

    Querido Pepín: "la Revolución siempre ha tenido un carácter más ético que ideológico, de eso casi no se ha hablado", esta es el dilema de los cubanos de hoy: hoy asumir la ética con virtud, o dejar que la Patria se deshoje entra las fauces de una burocracia mediocre que sólo le interesa proteger sus privilegios y riquezas al precio que sea necesario.....Este es uno de los mensajes esenciales de mi amigo Carlos Rodríguez Almaguer, uno de los buenos estudiosos de Martí que tiene Cuba

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  3. Arnoldo: Agradecido por tu explicación; y Dios quiera que vuestros deseos se cumplan.-

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  4. La corrupción en la isla se habilita desde la conquista, se hizo ley orgánica en enero de 1959, a la llegada La Habana el tren de la libertad, ocupo todo espacio dejado en la huida por los funcionarios del antiguo régimen, con la salida del país de miles de cubanos, se confiscaban sus propiedades, no importaba si eran ricos o pobres, si la casa o el bien era el fruto del trabajo de sus padres y abuelos, se perdía y era entregada a la nueva clase gobernante.
    Cientos de viviendas fueren entregadas a las tropas vencedoras de la sierra, ¿sobre qué derecho?, por la fuerza de la imposición y la conquista, la intervención de las grandes compañías, la industria y al final de los pequeños negocios familiares dio por sentado la isla les pertenecía.
    La clase dirigente ocupo las grandes mansiones de Miramar, se apropio de los autos abandonados por los oligarcas del antiguo régimen, los antes pobres combatientes-campesinos de la sierra se convirtieron en la clase gobernante, imponiéndose sobre el pueblo, se convirtieron amparados por el partido, por el poder y por la revolución en pequeños burgueses revolucionarios.
    La sangre derramada fue en vano, cambiamos el nombre de la oligarquía y de los explotadores capitalistas, el pueblo continuo viviendo igual y se encaminaba hacia lo peor.
    Se acostumbraron tanto al poder que este los convirtió en corruptos, ya las casas no eran para ellos, necesitaban más, una para la amante, otra para los hijos que se casaban, otra para el negocio y los dólares necesitados para su bienestar, ser corrupto no era un defecto, era una habilidad y un merito revolucionario, muchas veces se hablo de la corrupción, de la rectificación de errores, caían cabezas y otras se levantaban ocupando la posición antes dejada por el defenestrado.
    Le puedo contar un caso conocido por mí, de muy cerca, en el municipio de Marianao, en La Habana el Presidente del Poder Popular en combinación con el presidente de la vivienda negociaron el astronómico número de 111 casas, no es un invento, pregunten a sus amigos que paso en este municipio en el año 2002, el Presidente del Poder Popular fue trasladado al instituto de Aeronáutica Civil de Cuba, le había entregado casas a cuatro amantes. El Presidente de la vivienda fue condenado a 17 años, de los cuales cumplió menos de dos, no deseo pasar por alto, era un Mayor de la fiscalía militar de las fuerzas armadas.
    Que podemos esperar cuando Raúl ocupo para él, su familia y su guarnición todo un edificio en la avenida 26 en Nuevo Vedado y luego se mudo para una finca en el reparto siboney convirtiendo la posada “club 77” en la guarnición de su tropa, con qué derechos se hace tamaña ilegalidad, solo con la fuerza del poder.
    Por su parte Fidel tiene 55 casas a su disposición, un cayo al sur de Matanzas, zonas de caza y demás privilegios, se lo gano en la zafra o los tiene por el poder del dictador que más tiempo ha durado en la historia moderna.
    No olviden cuando regala autos a los deportistas, con que los pagaba, el es el dueño de la isla, no paga no explica, no es condenable ni se puede señalar.
    Perdonen si mis palabras han ofendido a alguien, pero en Cuba la corrupción tiene un nombre, Fidel, el partido y la revolución, no busquen más.

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  5. Ser honrrado""... dificil, sobre todo en sociedades sin derechos ni a eso, pero si existen hombres honrrados, y muchos. Yo todabia tengo fe en el ser humano, no podemos definir al mundo generalizando porque entonces nos incluiriamos en el . Creo que las honrradez como el antonimo ha exixtido desde siempre y eso no se va a herradicar jamas porque los seres humanos somos imperfectos, pero es definitivamente una de las grandes virtudes que puede tener un ser humano y si conozco muchos que lo son y me incluyo, aunque luzca mal no he hecho nada de lo que me deba avergonzar ni le he hecho mal a nadie, lo que tengo lo he sudado honestamente . Creo que hay que tener un poco de esperanza aunque estemos rodeados de deshonestos en los 4 puntos cardinales pero tu lo notas , es algo que vibra y que saca la cabeza , solo hay que hubicarlos y seguir adelante , te encontraras muchos en el camino . Fe y esperanza mi amigo

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