Por Reynaldo García Blanco.
El primer disco que yo tuve de Curtis Mayfield me lo regaló el poeta
Manuel Sosa. Se trataba de «Super fly» y si mal no recuerdo era del
año de gracia 1972. Manuel Sosa siempre traía en mano una que otra
rareza musical. Recuerdo que a manera de trueque le obsequié con un
ejemplar de Memorias de una enana, de Walter de la Mare.
Siempre fui partidario del trueque y en la otrora patria espirituana
intenté fomentarlo. Ofrecía mis modestos conocimientos de agronomía y
jardinería a cambio lecciones de acupuntura. Antonio Rodríguez
Salvador ofrecía lecciones de ajedrez a cambio de libros de filosofía
oriental. Pedro Mendigutía ejercía como profesor de Kárate por
conocimientos de religiones afrocubanas. Rubén Fernando Alonso
disertaba sobre Teosofía y recibía a cambio caligrafía china por
mediación de Hermes Entenza. Y así por el estilo. No mediaba el
dinero. Eran trueques de saberes.
Y a propósito de estos vasos comunicantes recuerdo que el próximo 26
de diciembre se van a cumplir 18 años de la muerte de Curtis Mayfield
y se me ocurre encontrar al menos uno sus primeros tres discos:
«Curtis» (¿1969?), «Curtis live» (1971) y «Roots» (¿1973?). A manera
de trueque puedo ofrecer la primera edición de Celestino antes del
alba, de Reynaldo Arenas o un ejemplar original del disco de Yoko Ono
«Unfinished music No. 1: Two virgins». Ustedes dirán. Felices
Pascuas.
LA PRIMERA FORMA DE COMERCIO.
ResponderEliminar¿Recuerdas que el dinero es el intercambio de equivalencias? Nació del trueque, que se hacía por la proporción de valores, de uso y de cambio, que lo da la cantidad de trabajo vivo y trabajo pretérito que conlleva el producir cada cosa a cambiar...
NO RESPETADO EN CUBA.