Tuve que reír muchas veces al ver a mi tío llamando a uno Donald y al otro, Skippy. |
Por Arnoldo Fernández Verdecia. arnoldo@gritodebaire.icrt.cu
No es Donald y Skippy en Cuba. No es Disneylandia, no. Tampoco es un video juego; es una finca, Cuba adentro, a unos 80 kilómetros de Santiago. Un dibujo animado y un canguro de las aventuras, reencarnan en animales reales.
A los que tienen mucha imaginación, no les faltarán argumentos para comprender una relación especial entre dos seres que se buscan mutuamente, comparten las comidas y hasta duermen juntos. ¿Qué animales son?
Tuve que reír muchas veces al ver a mi tío llamando a uno Donald y al otro, Skippy. Lo seguían fielmente adondequiera. Ver para creer, diría el más descreído. Yo los vi, mis ojos no me engañaron, un perro de bolsillo y un patito, tan sociables, que lo mismo, jugaban con niños y niñas, que lo hacían entre ellos, dándose abrazos, uno usando su larga paleta, el otro, abriendo y cerrando la boca.
La única manera de probar esta historia era con varias fotos, o al menos una, que reflejara un amor entre “hermanos” tan diferentes, que viven junto a mi tío, actualmente entregado a las bondades de Baco, pero capaz de comunicarse con Donald y Skippy, en una suerte de resurrección del caballero de la armadura oxidada.
Eddy Gil: Arnaldo cuando yo era niño tenia 5 gallos gallinas de raza Legones que fueron criados por ni desde que salieron de sus huevso. Les puse nombres tomados de las novelas cubanas 'Angeles de las Calles' y le puso un nombre como Valentin, etc etc y cuando ELLOS me veian se me acercaban, cuando los llamaba por su nombre venian tambien., Lo que comian eran buenos piensos, granos y hasta carne de res limpia...Vivieron por muchos años y el ultimo me lo comi por engaño de mis tias y por eso deje de comer carne de pollo por muchos años hasta que llegue al exilio.
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