El viejo me recordó aquel televisor metido en un cajón de concreto en el parque de mi pueblo, donde el campeón era una patria sobre el cuadrilátero. |
Por Eduard Encina (Escritor)
Tenía
solo siete años cuando mi padre me llevó al televisor público que había en el
parque de Baire, para que viera pelear a Teófilo Stevenson. La demasiada
algarabía me asustó y no logré concentrarme en los puños del gran Campeón. Sin
embargo, nunca he podido olvidar el coro de toda esa gente cada vez que
golpeaba el tunero, y los rostros se iluminaban por algo que solo después de
muchos años comprendí: sobre el ring había un país.
Aquel que guardó fidelidad a sus ideas y a su pueblo, ahora necesita que su pueblo le recuerde y no permita que las nuevas generaciones desconozcan que un día tuvimos un país sobre el encerado. |
Escuché
la noticia y un gong resonó dentro de mí: Teófilo Stevenson ha muerto. Salí
para avisarle a mi padre y nos sentamos juntos a esperar los detalles. Chávez
bailaba en el acto de incripción de su candidatura, el Presidente recibía a
otro presidente, un tal Honecker
y la cosecha de no sé que rayos en Bolivia eran titulares que ocupaban mayor
importancia que la muerte del más grande campeón del boxeo amateur del mundo.
Teófilo Stevenson: una historia inigualable de humildad y grandeza |
El
país es un ring, el ring es un país. Por fin mi padre escuchó la noticia y no podíamos
creer que hace unos días lo vimos durante el Cardín, en la entrega de medallas
y casualmente nos preguntábamos ¿Hasta dónde sabrán esos muchachos la grandeza
de que Stevenson le cuelgue las medallas? Enseguida el viejo me recordó aquel
televisor metido en un cajón de concreto en el parque de mi pueblo, donde el
campeón era una patria sobre el cuadrilátero, por la que los baireros una vez
más se congregaban en un grito anhelando la victoria.
Por
estos días los cubanos no hablan de otra cosa, el corazón está a media asta, el gran Teófilo de boca en boca y su mito de
imbatible se reproduce, se llena de de nuevos contenidos, que si Milian o Vysotskiy,
tal vez Cassius Clay,¿Savón? «la técnica es la técnica…», Munich, Montreal,
Moscú ¿Los Ángeles? El campeón de campeones. No hay otro.
Aquel
que guardó fidelidad a sus ideas y a su pueblo, ahora necesita que su pueblo le
recuerde y no permita que las nuevas generaciones desconozcan que un día
tuvimos un país sobre el encerado y una historia inigualable de humildad y
grandeza. Sé de lo malos que hemos sido construyendo símbolos, creamos
consignas y nos creemos vencedores, nos hacen falta marcadores perdurables,
imágenes qué imitar, prácticas qué defender. Entonces los niños ya no tendrán
que irse a un televisor público para verlo combatir, podrían ver sus peleas y documentales
en un DVD, su imagen en las camisetas,
en los almanaques. Los más jóvenes no lo deben desconocer y ojalá no tengan un
padre como el mío, que esa anoche se levantó cabizbajo, me puso la mano en el
hombro y me dijo: ¡Estamos jodidos!
GOLPES
BAJOS
como
Teófilo Stevenson
dijo
mi padre
antes
que ismael, el gambao
por
cuarta vez me partiera
la
nariz.
como
Teófilo Stevenson
dije
yo frente al televisor
cuando
tyron biggs caía
macizo
sobre la lona.
al
norteño lo sacaron en camilla
ismael,
el gambao, siguió partiéndome
la
nariz
a
Teófilo Stevenson siempre le alzaban
el
brazo
mi
padre no entendió.
Jose Julio: Teófilo Stevenson, que buenos recuerdos, pero el no era tan viejo... y tampoco cojio muchos golpes, muy tecnico y pegador...que pena su muerte...bueno lo recordamos que importante tambien... El segundo entrenedor de Teofilo era de contramaestre y se llama Sarvelio Fuentes... para darle credito apropiado con la conversacion al las glorias de nuestro pueblo...
ResponderEliminarEduard Encina: José Julio, qué bueno que lo recuerdas, una derecha fulminante y una técnica impecable. Conozco a Sarbelio Fuentes, él nunca ha olvidado su tierra y de vez en cuando se descuelga por acá.
ResponderEliminarY de Baquerito,¿Te acuerdas?.
Gracias por mantener un puente con tus raíces.
Eduard.
Teofilo: Negro, humilde, de pocas palabras refinadas, pero cubano digno de las zapatillas a los guantes. No adevertí un gran luto posterior a su muerte, sí mucha admiración de todo el pueblo que tiene motivos para recordar al gran campeón que dio derechas fuertes dentro del cuadrilatero y fuera de él a quienes quisieron comprarlo. Les invito a través de este magnífico blog si Arnoldito me lo permite a leer lo que sentí al conocer la muerte del campeón:Stevenson, murió la derecha fuerte de Cuba http://citaconangel.blogspot.com/
ResponderEliminarRaquel Fuentes Rivera: QUE LÁSTIMA, ES QUE TENGO PROBLEMAS DE CONEXIÓN Y NO ABRÍ ANTES , REALMENTE ME DUELE EL GIGANTE FUE UNA LEYENDA, ARNOLDITO DE QUE MURIÓ, BESITOS PAA TI Y TU FAMILIA
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