Por Arnoldo Fernández Verdecia. caracoldeaguaoriente@gmail.com
I
Llego
a media vida con escasos amigos, la mayoría se fueron por el mundo, otros plantaron
trampas a la luz; nunca les importaron mis libros, ni la soledad de una mujer que
siempre dijo antes de irse, escribir no da comida; ni la ingenuidad de un padre maternal regando agua fresca sobre mis ojos, ni mis
compañeras de trabajo que se la pasan
inventando para no hacer nada, atrapadas en las volutas de humo que mandan al
espacio sideral día por día.
Algunos me creen cansado; se alegran de la oscuridad con que escribo y fabulan sobre una estatua de
Rodin en un parque de Contramaestre donde los niños se tomarán fotos junto a su padres, uno que
otro forastero prenderá un cigarro y nunca sabrá el agravio que me produce el
humo. Los gorriones construirán casas entre mis dedos y seré muy feliz porque
al menos tendré uno cada día en mi ventana.
Tengo plena consciencia de que no tendré
glorietas donde bandas de música entonen himnos a mi memoria; ni seré un
oráculo al que acudan los jóvenes a preguntar sobre la patria y la dignidad.
Sencillamente estaré ahí, muy atento a las flores de la loquita amante de mi
barba rala y mi bigote martiano. Me tomaré su verde y con ese fresco haré una
casa habitada por el silencio y en ese reino seré yo, allí, donde nadie me vea,
donde nadie nos vea, donde pueda ser feliz y al menos tener algo más que un
gorrión en la ventana.
SON TIEMPOS DE RECORDAR QUE LA JUSTICIA TIENE QUE SER TAN ALTA COMO LAS PALMAS REALES, QUE LA REVOLUCIÓN DEL DECORO, DEBE DAR PASO A LOS DIRIGENTES VIRTUOSOS, A LAS INSTITUCIONES VIRTUOSAS, AL PUEBLO VIRTUOSO.
MAL ANDA UN PUEBLO QUE OLVIDA EL EJERCICIO DE LA DIGNIDAD COMO META SUPREMA DE LOS HOMBRES. BIEN ANDA UN PUEBLO DONDE TODA LA GENTE ES ESCUCHADA Y TENIDA EN CUENTA A LA HORA DE HACER POLÍTICA. BIEN ANDA UN PUEBLO QUE SABE HACERSE ESCUCHAR Y LOS QUE DIRIGEN LOS TOMAN EN CUENTA PARA HACER LA AGENDA DE GOBIERNO.
QUIZÁS SEAN DEMASIADO INGENUAS ESTAS PALABRAS, PERO ME SALEN DEL ALMA Y HONESTAMENTE CREO EN ELLAS.ESTÁN DIRIGIDAS A MI PROPIA ESTATUA.
II
A VECES ME MONTO COMO MARTÍ EN LA BICICLETA DE MIS PENSAMIENTOS Y QUIERO ENTENDER LA CUBA REAL, LA QUE VIVO A DIARIO, LA DE VERDAD, LA QUE DUELE PROFUNDO, LA QUE AMO CON SENTIDO DE CUBANÍA REFULGENTE, PERO MIS CUBAS AHÍ, ME INTERROGAN A DIARIO, SON TANTAS, PERO UNO SIEMPRE SUEÑA LA MEJOR, LA QUE NOS AYUDE A VIVIR CON MÁS DIGNIDAD Y ESA TENEMOS QUE FORJARLA AL CALOR DE LOS CAMBIOS NECESARIOS. SON TIEMPOS DE RECORDAR QUE LA JUSTICIA TIENE QUE SER TAN ALTA COMO LAS PALMAS REALES, QUE LA REVOLUCIÓN DEL DECORO, DEBE DAR PASO A LOS DIRIGENTES VIRTUOSOS, A LAS INSTITUCIONES VIRTUOSAS, AL PUEBLO VIRTUOSO.
MAL ANDA UN PUEBLO QUE OLVIDA EL EJERCICIO DE LA DIGNIDAD COMO META SUPREMA DE LOS HOMBRES. BIEN ANDA UN PUEBLO DONDE TODA LA GENTE ES ESCUCHADA Y TENIDA EN CUENTA A LA HORA DE HACER POLÍTICA. BIEN ANDA UN PUEBLO QUE SABE HACERSE ESCUCHAR Y LOS QUE DIRIGEN LOS TOMAN EN CUENTA PARA HACER LA AGENDA DE GOBIERNO.
QUIZÁS SEAN DEMASIADO INGENUAS ESTAS PALABRAS, PERO ME SALEN DEL ALMA Y HONESTAMENTE CREO EN ELLAS.ESTÁN DIRIGIDAS A MI PROPIA ESTATUA.
III
De saludar a una persona te invade. Abraza el cuerpo. Lo desborda con fiebres. Noquea la voluntad. Te hace sentir gris. El paladar pierde la capacidad de definir. La cabeza pesa una montaña. Lo único que quiere uno es tomar sopa de gallina, acompañada por un mogo de plátano o malanga. Genera tos continua, picazón en la garganta, mal aliento. Anda en mi pueblo como reina. Toma a los que quiere. Su fuerza es espantosa y eso que todavía no andamos en invierno. Se llama GRIPE. Ahora soy esclavo de sus designios. Espero vencerla con limonada caliente, calmantes, vitamina c y fuerza para que no mande al cuerpo a la cama y me gane.
Es precioso arnoldo... Un abrazo amigo.
ResponderEliminarIsora