La derecha está envalentonada, debe recuperar el terreno perdido en el continente, aunque para ello tenga que pasar por encima de muertos, violencia y mentiras. |
Por Arnoldo Fernández Verdecia. arnoldo@gritodebaire.icrt.cu
Venezuela bolivariana lleva adelante una campaña internacional para enfrentar la estrategia de la derecha, esta última, empeñada en demostrar en todos los foros la ilegitimidad de Nicolás Maduro en las elecciones del pasado 14 de junio.
Entre las acciones desestabilizadoras de la imagen moral de Venezuela en los foros mundiales sobresalen: el ataque a la prensa chavista y sus principales voceros, para desacreditar sus mensajes y provocar una crisis de credibilidad en el ejercicio de la profesión. El principal mensaje que hacen llegar es que ningún periodista del chavismo es creíble.
Otra zona usada por la derecha venezolana es la de erosionar las relaciones del gobierno bolivariano con el colombiano, y provocar con ello la ruptura de relaciones bilaterales entre ambas naciones sudamericanas. Primero, diputados conservadores se reunieron con los diputados colombianos, expusieron su visión parcializada de la situación interna de su país de origen; luego Henrique Capriles se reúne con el presidente Juan Manuel Santos y le pide ayuda para rescatar la democracia en Venezuela. Lo cierto es que las relaciones entre ambas naciones están al borde del abismo.
No puedo dejar de reflexionar sobre la campaña difamatoria contra los principales líderes chavistas, con el fin de provocar desencanto en sus seguidores, y construir las bases morales para un revocatorio en dos años y medio, y restaurar con ello, el cauce democrático tradicional, favorecedor de la oligarquía y el vecino imperial.
Los medios difunden rumores, chismes de pasillo, todo lo que desprestigie al chavismo en los foros internacionales, por supuesto, en esta cruzada no puede faltar Estados Unidos, que a través de su Secretario de Estado ha dicho que América Latina es su patio trasero, y deben retomar sus posiciones tradicionales en la misma.
La derecha está envalentonada, debe recuperar el terreno perdido en el continente, aunque para ello tenga que pasar por encima de muertos, violencia y mentiras. Enfrentarla y vencerla sólo es posible con la unidad de las fuerzas involucradas en la lucha por un mundo mejor. En esta hora del continente es estratégico permanecer en cuadro apretado como las raíces de los Andes.
Todo llegará.- Pero los muertos, violencias y mentiras, no son patrimonio de la derecha. Solo los que usan la razón de la fuerza en lugar de la fuerza de la razón, esgrimen armas viles y mezquinas.-
ResponderEliminarEn estos momentos me estoy acordando del juicio celebrado en Bayamo al amigo de Payá, muerto en un accidente de automóvil ¡ accidente de automóvil ! ja,ja......