Ricardo del Toro Tamayo. |
Por Ricardo del Toro
Tamayo. (Reside en Estados Unidos)
Toda conmemoración
acarrea símbolos, el caracol tiene varios.
Como puedes leer, un
sencillo caracol, es algo más que un bichito que se mueve lentamente con su
casa a cuestas, es todo lo que queramos
ver asociado a su aspecto, su lentitud, sus cuernecillos o su concha. Es emblema de comunicación, fertilidad y
crecimiento. La espiral que tiene el
caracol en su interior se convirtió en el símbolo de la PALABRA, por esa razón
en los códices, la espiral sale de la boca del que habla.
Al celebrar el Año 7
del Caracol de nuestro amigo Arnoldo,
tomo consideraciones antiguas, el dígito 7, se compone del sagrado número 3 y del terrenal número
4, estableciendo así, un puente
entre el cielo y la tierra. Esto nos lleva a reflexionar sobre la importancia
de ese pontón que debe comunicar
nuestras dos orillas en este mundo nuestro sin importar si es virtual o
real.
Podemos discrepar en
ideas, métodos y diferencias que a veces
se tornan divisivas. Nadie posee la verdad absoluta, cada cual tiene la suya,
lo hermoso es permitir al otro su pensamiento y que aquel respete el nuestro.
¡TOLERANCIA y HUMILDAD! Al final, existe un juez infalible que se
nombra RESULTADO, muestra si sobrevives soñando con un pensamiento fallido, o
si vives en la realidad de otro exitoso.
Entre esos dos puntos radica la certidumbre.
Arnoldo, amigo, admiro
tu tenacidad, escribir no es tarea fácil, en otras profesiones, oficios y ocupaciones
están predeterminadas las labores del día, sin embargo, el escritor
o periodista no descansa aunque esté
dormido, porque un poco vive del sueño. Cuando se levanta cada mañana
tiene que elaborar y dar vida a esa vivencia onírica, o desecharla y salir
como un cazador furtivo en pos de una presa que le resulte inspiradora.
¡Felicidades! Por haber llegado al grandioso mágico 7…
Dante Alighieri lo usaba en sus obras y la Biblia lo menciona con
frecuencia. Va de las siete maravillas
del mundo a los siete pecados capitales.
Adelante amigo lector,
siga a este hombre empecinado en que su farol no se apague, disfrute la luz, la vida está plagada de caminos
oscuros. ¡Vida al Caracol de agua!
Como siempre bellas palabras de alguien a quien admire y respeto con todo mi Corazon. Me uno a tus palabras y que Caracol siga con su paso lento para dar tiempo a su disfrute . Felicidadez y que vengan muchos mas
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