De derecha a izquierda: Eduard Encina junto a su padre en casa en Baire. |
Por Arnoldo Fernández Verdecia. caracoldeagua@cultstgo.cult
Para Eduard Encina ser un
intelectual periodista significa tener una comprensión del mundo y poder
comunicarla a los otros desde su natal Baire, aquí en Cuba. Es imprescindible,
según Encina, ser un intelectual periodista, sobre todo por la necesidad que
tiene la gente de estar informado oportunamente. En conversación con Caracol deagua señaló:
“Para mí, un intelectual periodista es una
persona que tiene una comprensión del mundo y quiere darla. Es muy difícil
desde Cuba ser un intelectual periodista, pero es imprescindible serlo, sobre
todo cuando te das cuenta que el periodismo cubano tiene varias lagunas, no
acaba de vencer lo que tiene que decirle a la gente, el momento de decírselo,
cómo tiene que hacerlo y la necesidad que tienen las personas de estar bien
informados de la realidad que acontece.
“La falta de valentía política
del periodista lo mete en una cápsula que no lo deja respirar. Creo que los
intelectuales deben ayudar a sustituir eso, porque nosotros los intelectuales
tenemos que convertirnos en creadores de opinión, a
partir de la credibilidad que tienen los seres humanos en nuestra figura
pública.
“Para la gente tenemos una ética
en el actuar público, atesoramos conocimiento, incluso una ética en la
producción literaria, de pensamiento, por tanto, urge que tomemos las armas del
periodismo para poder comunicarle lo que realmente necesitan”.
La función del intelectual
periodista, según Encina, “es convertirse en creador de opinión; en pocas
palabras, tomar las armas del periodismo y comunicarle a la gente desde Baire,
Contramaestre, La Habana o cualquier lugar de la isla, lo que necesita saber
para decidir y participar calificadamente en la construcción de la nación de
todos”.
¿ Los que no son periodistas, no pueden ser intelectuales ?
ResponderEliminarCreo que has tenido un lapsus incalificables, ante tal manifestación. Pero, bueno, es tu opinión, que merece respeto aunque no se comparta.- PEPIN