miércoles, 25 de enero de 2017

Facebook es la casa más amada de los cubanos



Muchos se acuestan día tras día soñando ser un navegante de Facebook.

Por Arnoldo Fernández Verdecia. caracoldeaguaoriente@gmail.com 

Con el pueblo al hombro he caminado Facebook por muchos años, he conocido gracias a su espacio, personas muy especiales. Algunas allí me han descalificado, pero la mayoría no han caído en esas trivialidades; en verdad, estas últimas, son como de la familia; con ellas he vivido jornadas  repletas de afectos sinceros,   incluyendo esos diálogos horizontales, donde la verdad es relativa.

Facebook es una casa para los cubanos, no importa donde vivan, ni como piensen; allí las jerarquías se olvidan;  la gente se busca para construir puentes;  tejer nuevos afectos y sobre todas las cosas, dialogar, dialogar, dialogar; eso que los teóricos llaman comunicación.

Gracias al puente surgido entre miles de personas que interactuamos día a día, he aprendido a respetar el criterio del otro, ha ponerme en su lugar;  a quererlo con sus defectos y virtudes.

Los cubanos usamos más Facebook que Twitter quizás por la economía de espacio que este último exige. En el primero, navegamos a lo ancho, a lo profundo, casi nos tocamos oídos, ojos, sentimos en la piel cada palabra; es como si la vida nos entrara por ese verde que se prende cuando alguien te sigue y desea confraternizar.

Con Facebook el cubano de a pie empieza un diálogo que pasa por ingenuidades y poses eróticas, casi tomadas de revistas de modas; sobre todo los que llegan por vez primera allí y lo habitan; creen que con un guiño cómplice, o una posición donde el cuerpo hable de encantos, el mundo caerá rendido a sus pies y el molino moverá las viejas aspas y pondrán proa a Miami, París, Nueva York, Berlín o Madrid, por mencionar las más comunes, entre las ciudades soñadas por los nuevos inquilinos.

Cuando el verde se prende, los sentimientos estallan. Besos, cariños multiplicados; todo un convite de alegre convidarse traspasa las fronteras del suceder diario. Muchos se acuestan día tras día soñando ser un navegante de Facebook;  es uno de los deseos más caros en las aspiraciones infantiles y juveniles. Niños de cuatro, cinco y seis años, hablan con lucidez de conectados y no conectados, de la video llamada, de lo que puede encontrarse al pisar la Wi-Fi y sentirse un ciudadano del mundo.

Me sorprendo muchas veces ante la velocidad de lo digital y el paso de tortuga de lo analógico: ¿Qué harán los maestros atrapados en la vieja imprenta? ¿Qué harán los padres con sus verdades de la prensa tradicional diaria? ¿Qué harán los jefes que subestiman lo digital?

Facebook anda entre nosotros. Casi siempre nos sobrevuela con su alcance. El día del sismo en Guamá, municipio de Santiago de Cuba, muchos corrieron a los medios oficiales,  otros a lo digital, buscaban la información oportuna, amplia, los primeros estaban atrapados en sus rutinas diarias, pero Facebook fue el primero, allí un periodista santiaguero encontró el espacio para poner el dato preciso y ampliarlo en sus detalles más esenciales; Cuba supo del sismo por Facebook, esa es la verdad.

Se acerca el momento en Cuba de la migración cultural a lo digital, pero uno se pregunta: ¿Estarán a la altura del momento los que toda la vida han pensado en analógico? Mientras llega la respuesta, Facebook es la nueva casa que los cubanos habitan;  allí todo sucede, todo es información, aunque muchos nos resistamos todavía a considerarlo una fuente creíble, para armar nuestras noticias del día.

2 comentarios:

  1. Muy buen post... facebook es además para algunos la oportunidad de expresar en su muro, lo que otros muros cotidianos no le permiten, y para otros es la trichera para defender ideas. Facebook, a fin de cuentas, es algo maravillosa (y también peligrosa) para todos los gustos.

    ResponderEliminar
  2. Arnoldo:
    Más ahora que Facebook elimina las noticias falsas.

    ResponderEliminar

MUY IMPORTANTE: No se publicarán comentarios anónimos en este blog, es necesario consignar siempre la identidad de la persona. No se admiten ofensas, insultos, propagandas de ningún tipo. Cada persona tiene la libertad de expresar lo que piensa, pero con respeto al otro diferente. d



Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

Aviso a los lectores de Caracol de agua

Este blog admite juicios diferentes, discrepancias, pero no insultos y ofensas personales, ni comentarios anónimos. Revise su comentario antes de ponerlo, comparta su identidad y debatiremos eternamente sobre lo que usted desee. Los comentarios son propiedad de quien los envió. No somos responsables éticos por su contenido.